En
las últimas semanas he observado como la mayoría de bogotanos tienen una idea
clara y unos argumentos válidos de por quien votar a la alcaldía, pero en
paralelo existe confusión y desinterés de por quien hacerlo al Concejo de
Bogotá. Es por este desdeñoso desconocimiento por el que muchos politiqueros
logran reelegirse como concejales. A causa de la apatía de muchos bogotanos,
sus microempresas electorales, sus maquinarias políticas sólo necesitan unos
cuantos miles de votos para llegar al cabildo. Una vez en el Concejo votan
proyectos pensando en hacer crecer su microempresa electoral (recibiendo cargos
distritales a cambio de votos) en detrimento de elegir lo mejor para la ciudad.
Por
esto es importante remontarnos a los griegos, y al origen etimológico de
idiota, que se refería a aquellos ciudadanos que sólo se preocupaban por sus
intereses privados, y no se ocupaban en debatir y votar sobre asuntos públicos. Para evitar ser idiotas en el sentido
etimológico, escribí este blog esbozando las razones por las que creo y voy
votar por el candidato al concejo Diego Laserna.
La
primera razón es su compromiso. No es un compromiso de coyuntural electoral,
sino uno profundo y pasional. Que más pasión que organizar de manera voluntaria
por 6 años ininterrumpidos tertulias semanales sobre las problemáticas de
Bogotá. Su Combo 2600 se reúne todos los martes en torno a un experto a
discutir distintos temas de la ciudad... Desconfíen y mucho de eso activista
electorales, ellos son los que aparecen en elecciones, y luego por tres años se esconden detrás de su curul.
Laserna con su ejemplo es garantía de continuar un diálogo abierto y franco con
su electorado.
La
segundo razón es la renovación que él significa. Si Laserna logra la curul es
por personas como usted y yo, ciudadanos que nuestro sustento no depende de un
contrato público, lo que se conoce de manera etérea como voto de opinión.
Laserna es un político sin maquinaria, es una persona que vive para la política
y no de la política (Parafraseando a Max Weber).
La
tercera razón es esa combinación entre la calle y los libros. Laserna estudió
en las mejores universidades de EE.UU (Columbia y MIT), pero a la vez lleva
años recorriendo las calles. Por ejemplo el día del paro de los taxistas se fue
a Suba a hablar de primera mano con los protestantes, para saber sus demandas y
entender sus argumentos. Para mí un buen político debe combinar la educación
con esa vocación de escuchar a los ciudadanos de a pie.
El
cuarto son su actitud, propuestas y
promesas. En su actitud busca reconocer lo bueno del otro. En estos tiempos de
polarización, aunque pueda ser acusado de tibios, prefiero un político que
critique y resalta lo bueno de una administración a uno que ve con aumento los defectos
y con miopía las bondades. A la emoción que genera la política es importante
meterle razón.
Sus propuestas
aunque tímidas, al menos son serias pues son realizables. Una de ellas en los
paraderos se les informe a los usuarios de manera precisa cuanto tiempo deben
esperar. Esto permite a la gente optimizar su tiempo. Otras es la de no hacer
uso de su esquema de seguridad. En cuanto a su promesa ya se comprometió en
caso de ser elegido a renunciar a su esquema de seguridad, y además reto a otro
candidatos a que se comprometieran a realizar esta promesa. La premisa es
simple el esquema de seguridad para alguien que en verdad lo necesite.
Pero
Laserna también tiene pecados que les quiero compartir. El primero es que a
pesar de ser bogotano es fanático del Deportes Tolima (Hincha de sufrir en el
estadio). Creo y sostengo que un bogotano debe ser hincha de un equipo bogotano,
para mi lo contrario es como si un colombiano le hace fuerza a Perú en las
eliminatorias. Su segundo pecado es su eslogan: Bogotá necesita más nerdos. El
primero es difícil de tragar, pero el segundo es más justificable, en un
escenario tan competido (Hay 555 candidatos para 45 curules), lo primero que busca
un candidato es diferenciarse. Por nerdo quiere marcar una distancia con los
políticos tradicionales y populistas, de esos que se lavan la mano después de
darla. El asunto es que para mi y muchos de mi generación un nerdo es sinónimo
de sapo, aburrido y poco confiable en cuanto a guardar el secreto de una
travesura. Pero entiendo que Laserna busca transmitir en esas cuatro palabras su
compromiso de ser un concejal juicioso, esos especímenes escasos que asisten
todos los debates, y que leen de antemano y manera critica los proyectos que se
van a presentar.
Laserna
ha recibido algunas criticas en redes sociales por ser un privilegiado, pero
serlo no es un defecto ni una virtud. Es más yo destaco que una persona con
opciones para elegir una vida profesional de confort, se la haya jugado por el
tortuoso camino de buscar y pelear votos. La política electoral no es fácil, y
no es para cualquiera.
Por lo expuesto voy a votar al concejo por el número 26 del Partido Verde (El 26 es fácil de recordar al asociarlo con la altura de Bogotá). Invito a las personas a que voten a conciencia y lo hagan por Laserna. Pero si no lo hacen por él, busquen a un candidato que comparta su principal característica: compromiso por servir e independencia de las maquinarias.
Por lo expuesto voy a votar al concejo por el número 26 del Partido Verde (El 26 es fácil de recordar al asociarlo con la altura de Bogotá). Invito a las personas a que voten a conciencia y lo hagan por Laserna. Pero si no lo hacen por él, busquen a un candidato que comparta su principal característica: compromiso por servir e independencia de las maquinarias.